miércoles, 19 de marzo de 2014

Proyecto de investigación: búsqueda bibliográfica

Buscador: Scielo
Casini, Silvia. "Narrar la violencia. Espacio y estrategias discursivas en Estrella distante de Bolaño." Revista Alpha edición aniversario (2010): 147-155.
Este estudio analiza la función de los espacios en blanco dentro de la novela Estrella distante, los cuales  interpreta como elementos que dan cabida a la inducción del contexto histórico de la obra, así como de referencias intertextuales (incluso a obras del mismo autor). Casini establece que Estrella distante es una novela policiaca cuyo fin es una crítica al Golpe Militar de Pinochet.
Los elementos del presente ensayo que contribuirán a mi proyecto son: la perspectiva del pasado como una memoria caótica e insondable,  la interpretación de Wieder desde la fragmentación y el uso de las dicotomías.
Buscador: Google académico
Companys, Mireia. Identidad en crisis y estética de la fragmentariedad en la novela de Roberto Bolaño. Universidad Autónoma de    Barcelona, 2010.
Este estudio aborda la fragmentariedad en Bolaño a partir del estudio del doble, de la relación entre arte y barbarie, además de la polifonía y los espejos intertextuales. Esta tesis abarca casi todos los puntos de interés que desarrollaremos en nuestro trabajo, tanto argumentativa como estructuralmente.
Buscador: Scielo
López, Ignacio. “Malestar en la literatura: escritura  y barbarie en Estrella distante y Nocturno de Chile de Roberto Bolaño." Revista Chilena de Literatura (2009): 199-215.
Este estudio es una  interpretación de las novelas Estrella distante y Nocturno de chile que se fundamenta en las Tesis de la filosofía de la historia de Walter Benjamin. El objetivo de López Vicuña es representar el vínculo entre alta cultura, civilización y violencia, barbarie, bajo las acciones de los personajes, las ideologías presentes, y el contexto de las novelas mencionadas.
Los aspectos que relacionaremos a nuestro proyecto serán: la justificación de la presencia del vínculo entre literatura y barbarie en Estrella distante; y la categorización de Wieder, como una metáfora del fascismo.
Buscador: Google académico
Valeria, Bril. “Roberto Bolaño, un habitante extraviado en la literatura chilena." Universidad Nacional de Córdoba SeCyT (2009): 144-197.
Este trabajo analiza las relaciones intertextuales entre Roberto Bolaño y la Nueva  Narrativa Chilena. Este trabajo nos será útil para delimitar las conexiones entre Bolaño y los intelectuales de su país natal, teniendo en cuenta su atribuido carácter anticanónico. Esto como parte de la definición de la ideología a la que se liga el autor.
Buscador: Google académico
Willem, Bieke. La literatura y el mal: el caso de 2666 de Roberto Bolaño. Universidad de Gante, 2008.
Esta tesis de maestría constituye una construcción de la dicotomía mal-literatura dentro de 2666, haciendo una recorrido dialectico de la modernidad desde Benjamin, Hannnah Arendt (y su Eichmann en Jerusalén) Heidegger y Baudrillard, hasta apoyarse de críticos  como Bataille (en La literatura y el mal) y Steiner (En el castillo de Barba Azul…) para conformar una relación que permita la estructuración de ambos conceptos bajo la perspectiva de Bolaño. El interés en este trabajo es muy amplio, no sólo por su travesía en torno a la crítica de Bolaño, sino por sus valoraciones teóricas que apuntan al centro de nuestra investigación.



jueves, 6 de febrero de 2014

Sobre el Post-estructuralismo 2.0

1- ¿Qué es un signo saludable y un signo doble?
Un signo saludable es un signo que hace evidente su condición artificial, es decir, que no desea parecer natural puesto que no pretende ofrecer la realidad ‘como es’, a diferencia del signo realista que es autoritario e ideológico en su afán de representar una ilusión.
El signo doble es aquel que posee un significante asociado a dos significados (refiere a su propia existencia material). Su mejor ejemplificación es la ironía,

2.- ¿Qué es un texto escribible?
El texto escribible es la suma de las posibilidades de la reescritura de un texto. Está constituido por una galaxia de significantes infinitos y circulares. Su capacidad de reestructuración depende de las ilimitadas perspectivas en torno a él.

3.-¿Cuál es el grado cero de la escritura?
Es el elemento neutral que existe en la escritura respecto a la historia y a las ideologías. Es el uso de las palabras apuntando a la ausencia de referentes. Poseer la pasión de escribir por escribir.

4.- ¿Cuál es el último terreno que queda al placer del significante?
Escribir (leer como si se escribiera) en respuesta a todas las teorías, ideologías, significados definidos, compromisos sociales. Es decir, que la escritura es el único medio de corromper los significados estructurales.

5.- ¿Cuál es la relación entre el post-estructuralismo y el compromiso político?
El pos-estructuralismo, de acuerdo a Eagleton (1998), surge de la “mezcla de euforia y desilusión, liberación y disipación, carnaval y catástrofe de 1968”. Es el instrumento que permite subvertir la estructura del lenguaje para cuestionar las estructuras políticas.

6.- ¿Cuáles son los argumentos de Eagleton contra los post-estructuralistas?
El retiro hedonista de la historia, refiriéndose a que la desconstrucción no buscaba “negar la existencia de verdades, significados, identidades, intenciones y continuidades históricas relativamente determinados” sino que sólo se ocupaba de desmantelar el sistema de estructuras políticas y de instituciones sociales.
El culto de la ambigüedad de la desconstrucción norteamericana al no sentar ninguna base y  disolver todo significado y toda identidad.
El anarquismo irresponsable en referencia al feminismo que en momentos sólo se enfocó en el sufrimiento de la mujer y en su participación social.

7.-  Busca un texto que ejemplifique el signo saludable y el signo doble.
Un excelente ejemplo de signo saludable es El médico de la aldea de Balzac donde la ideología que pretende naturalizar la realidad social es el ideal de progreso. Por otro lado, el signo doble puede ejemplificarse mediante el presente poema, alegórico y simbólico, de  Wisława Szymborka.:


Primera fotografía de Hitler


¿Y QUIÉN ES ESTE NIÑO con su camisita?

Pero ¡si es Adolfito, el hijo de los Hitler!

¿Tal vez llegue a ser un doctor en leyes?

¿O quizá tenor en la ópera de Viena?

¿De quién es esta manita, de quién la orejita, el ojito, la naricita?

¿De quién la barriguita llena de leche? ¿No se sabe todavía?

¿De un impresor, de un médico, de un comerciante, de un cura?  

¿A dónde irán estos graciosos piecitos, a dónde?

¿A la huerta, a la escuela, a la oficina, a la boda

tal vez con la hija del alcalde?



Cielito, angelito, corazoncito, amorcito,

cuando hace un año vino al mundo,

no faltaron señales en cielo y en la tierra:

un sol de primavera, geranios en las ventanas,

música de organillo en el patio,

u presagio favorable envuelto en un fino papel de color rosa.

Antes del parto, su madre tuvo un sueño profético:

ver una paloma en sueños, será una buena noticia;

capturarla, llegará un visitante largamente esperado.

Toc, toc, quién es, así late el corazón de Adolfito.

[Fragmento]

Referencias

Eagleton, Terry. (1998). Una introducción a la teoría literaria. México: Fondo de Cultura Económica.
Szymborka, Wisława. (2012). Primera fotografía de Hitler.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Cultura popular: El 'arte de masas'

La cultura popular es un  fenómeno de carácter socioeconómico que se configura mediante relaciones de poder. El concepto surge de una construcción teórica interdisciplinaria  y su estudio ha sido formalizado por los llamados estudios culturales.
Los presupuestos teóricos que permiten la edificación de la cultura popular son iniciados por Theodor W. Adorno y Max Horkheimer, especialmente, en su ensayo La industria cultural: la ilustración como decepción de las masas. Obra en la exponen la degradación del arte al subyugarse a la economía como medio de consumo. La ‘cultura de masas’, concepto precedente al de cultura popular, se comprende así bajo los modos de la racionalidad económica (eficacia, cálculo y predicción), en donde la obra se vacía de su significado espiritual y estético para ser valorada por su capacidad de generar beneficios.
Una de las teorías de la cultura  popular, que ha sido clasificada por María Luengo como ideal-colectivista, se constituye en La obra de arte en la época de su reproductibilidad técnica de Walter Benjamin. Esta teoría reconfigura la propuesta teórica de Adorno y Horkheimer.
En Fundamentos y carencias de los estudios culturales, María Luengo explica que una de las grandes aportaciones de Benjamin respecto a la cultura popular es considerarla como una nueva forma de arte. Asimismo, “El análisis de Benjamin sobre el arte contemporáneo de la reproducción acabó en la superación revolucionaria tradicional del arte tradicional y el aplauso a una nueva forma de arte al servicio político de las masas”. Esta ‘politización del arte’ puede comprenderse a la perfección si se considera el papel del arte en la Alemania nazi, su realismo heroico no sólo reflejaba el rasgo de ‘lo monumental’, también poseía una función propagandística. Quizá el único elemento antagónico a la cultura popular sería su carácter tradicionalista, aunque no por ello dejaría de ser un fenómeno de masas.
Uno de las cualidades innatas que Benjamin reconoce en toda obra es el aura (o singularidad) “El aquí y ahora del original constituye el concepto de su autenticidad” (Benjamin, 2007). La reproducción destruye la dimensión artística de la obra “…en la época de la reproducción técnica de la obra de arte, lo que se atrofia es el aura de ésta” (Benjamin, 2007). El valor de ‘ocultamiento’, de misterio o magia que poseía la obra, tras un proceso de creación semejante a una experiencia ritual, desaparece al reproducirse continuamente. Es decir, que se banaliza[1] el significado de la obra de arte. Este proceso de banalización puede observarse continuamente (el cine y la televisión son los medios que más incurren en estas prácticas). Una de las formas que permiten la banalización del arte es la parodia.
Un peculiar ejemplo de la función política en la cultura popular es la saga de las películas Transformers que muestra de manera ‘monumental’ y ‘heroica’ al ejército de los Estados Unidos. Hay un enfoque poco común en la presentación del ejército (su estrategia, su armamento, entre otros) lo que de forma evidente sugiere el reclutamiento de jóvenes fascinados ante la tecnología de los marines.
Otra de las grandes reflexiones de Benjamin, en torno a la cultura popular, es el papel del cine, la ‘capacidad aislativa del cine’ Benjamin observa que el cine no apunta a la contemplación, puesto que se funda de manera inmediata en la reproducción. La masa no contempla la obra, se sumerge en sí misma a la obra artística “Las tecnologías de masas operaron en las reproducciones configurándolas desde dentro en función de un nuevo fin, que nada tenía que ver con el valor artístico del original”.
El papel del actor es también analizado por Benjamin en los ámbitos teatro-cine. Para Benjamin el actor de teatro presenta por él mismo su ejecución artística, mientras que la del actor de cine es presentada por todo un mecanismo, su actuación depende de tests ópticos. El actor de cine renuncia a su aura, porque no está frente al expectador al momento de su actuación y el aura sólo está en el aquí y  el ahora. Esto puede ejemplificarse con lo que en los últimos años se ha denominado como la insensibilidad del cine y la televisión. Si bien la katarsis no deja de existir al ver una película, la capacidad de reproducción del cine atenta contra su grado de expresividad.
La fotografía es también uno de los elementos en que el aura desaparece. Ello por su valor de exhibición. “En la fotografía, el valor de exhibición comienza a reprimir en toda la línea al valor cultural” (Benjamin, 2007).
En conclusión, puede decirse que Benjamin ha hecho un gran aporte a la construcción del concepto de cultura popular, así como a los estudios culturales. Su trabajo ha dado el matiz de funcionalidad política en la comprensión de la cultura popular.



Referencias
Benjamin, Walter. (2007). Conceptos de filosofía de la historia. Argentina: Caronte.
Benjamin, Walter. (2008). Tesis sobre la historia y otros fragmentos. México: Ítaca.
Luengo Cruz, María. (2006). Fundamentos y carencias de los estudios culturales: una revisión teórico crítica del ámbito popular.



[1] “No hay nada más terrible, insultante y deprimente que la banalidad”.
A. P. Chéjov

miércoles, 29 de enero de 2014

Sobre el Post-estructuralismo

1.- ¿Cómo es posible separar el significado del significante, de acuerdo con Eagleton y los post-estructuralistas?

Los estructuralistas evidencian la inestabilidad de la lengua al señalar la incapacidad de una relación fija y directa entre significante y significado. No existe nada que vincule directamente al significado con el significante, el significado se define sólo de las diferencias entre significantes. Tampoco hay una distinción fija entre significantes y significados ya que no hay un significado final que no sea un significante.

2.- ¿A qué se refiere cuando dice que el significado nunca es idéntico a sí mismo?

El significado no es idéntico a sí mismo porque su existencia depende de una cadena de significantes temporales. Es decir, que el significado no refleja un concepto determinado sino sólo un proceso de significación circular. El significado no tiene una identidad propia porque el signo se define de su oposición a otros signos, e inconstante por la naturaleza de todo signo de ser reproducible.

3.- ¿Cómo sería una experiencia o un concepto "libre de toda mácula"?
Somos lenguaje. Somos las frases y los clichés de los que estamos hechos.

Un concepto "libre de toda mácula” sería un concepto puro, un significado final, una verdad absoluta, en suma un concepto que no se formule a base de oposiciones. Es verdad que el lenguaje nos construye y articula nuestra concepción del mundo, más que el código de nuestro pensamiento. Hablar de la indeterminación del lenguaje, es hablar de la indeterminación del ser humano, tal como lo anticipa la segunda parte del Crátilo.

4.- ¿Qué es un significado trascendental?

Un significado trascendental sería una formulación que no proviniera de una jerarquía de significantes, es decir, que no se definiera a partir de la oposición

5.- ¿Qué es la desconstrucción?

La desconstrucción es una operación crítica que cuestiona la base dicotómica del pensamiento estructuralista. Analiza la lógica de las dicotomías para contradecir internamente todo sistema ‘metafísico’.


domingo, 26 de enero de 2014

¿Textos cerrados? no ¡abiertos!

El ‘lector modelo’ es quizá uno de los conceptos que mayor resistencia han provocado en los teóricos literarios respecto al proceso de lectura y al de creación literaria. La sola idea de que exista alguien capaz de poseer todos los mecanismos lingüísticos y ‘circunstanciales’ de distintas obras es alucinante, más aún si pensamos en que para comprender a los clásicos debemos movernos interpretativamente como generativamente lo hicieron Cervantes, Shakespeare o Goethe. Sin embargo este pretencioso  (ambicioso) enfoque merece un alto grado de profundización. Puesto que su crítica, que con avidez realizaron Barthes y Krtisteva, nos conduce a una nueva perspectiva de la lectura, en especial  su función en relación con la ‘literariedad’, a la esencia de la literatura.
La teoría de Umberto Eco puede discernirse, para su análisis, en tres elementos: texto, lector, autor.
El texto es un ‘mecanismo perezoso’ que requiere de la cooperación del lector para significar. Esto lo hace a partir de espacios en blanco que rellenará el lector. Pese a su carácter infinito de interpretación, cuenta con un margen de significado univoco. Aunque ese significado, o potencial de significado depende del lector. Se emite para que alguien pueda actualizarlo, a pesar de su ambigüedad de expresión y contenido.
Por otro lado, el lector es un ser con una cierta (ideal) competencia lingüística y circunstancial (pragmática y semiótica) que ‘descodifica el texto’. Aunque éste cuente con códigos privados y puntos de vista ideológicos propios. Es decir, una persona real. Y aunque aquella ‘descodificación’ sea instituida por el autor o emisor.
Un aspecto muy interesante, según Eco, es que el lector incompetente, o ‘enciclopédicamente pobre’ quedará atrapado en la incertidumbre, es decir que no resolverá los crímenes en las novelas policiacas, ni comprenderá el humor negro. Las (institucionalmente) incorrectas interpretaciones son de ese modo, en palabras de Eco, presuposiciones aberrantes. Cualquier nuevo análisis supondrá una desviación de la norma.
El autor, que en Eco goza de una férrea  autoridad y poder, puede describirse como un ser, que al igual que el lector, posee una ideología[1]  propia y es quien instituye la competencia del lector modelo. Es el ente que restringe el texto  y presupone un lector modelo para quien escribe con la manía de un estratega.
La presuposición del autor, si bien ha sido superada, puede ejemplificarse en textos con el valor literario que Kundera reconoce como un reto a la inteligencia (aunque no bajo la totalidad que le asigna Eco).
La clasificación que sugiere Eco de los textos es también de gran importancia: abiertos  y cerrados.
Los textos cerrados son textos dirigidos, con un margen cerrado de significación. Se empeñan en se comprendidos y apuntan “…a estimular un efecto preciso “(Eco, 1993: 82). Esto ejemplifica una de las ‘aberraciones’ de Eco, quien, a pesar de reconocer la distorsión de sentido en la literatura, presupone su valor estético, y más aún presupone la distorsión en la interpretación.
Para Eco, sólo una iniciativa externa puede violar el grado de significación del texto, como las interpretaciones que se han realizado de las novelas de Kafka y su vinculación a los totalitarismos y a las burocracias. Ello porque no existe una lectura oficial de El Castillo.
La ‘cooperación textual´ que según Eco constituye el fin de un texto, sin importar su ambigüedad y barroquismo, sólo se da en los textos cerrados, de otra forma es una violencia al texto, o mejor dicho transgresión.
Los textos abiertos, por el contrario, admiten innumerables lecturas y sugieren desviaciones. Son textos con un carácter mayor de significación.  Son ocasiones de una ‘aventura interpretativa libre’, como si la lectura no ofreciera libertad. El autor de un texto abierto sólo buscará que las posibles interpretaciones no se excluyan sino que se complementen entre sí. Cuestión que acaba con el carácter infinito de interpretación y que sigue presuponiendo una autoridad firme del autor respecto al horizonte de expectativas del lector.
Los textos que sin duda alguna  Eco definiría como abiertos serían los cuentos de Borges y Cortázar, 1982 y Un mundo feliz, aunque su teoría con seguridad sería ‘incompetente’ frente a un cuento como Casa tomada, que cuenta con múltiples interpretaciones sin que alguna pueda satisfacer por completo al lector, es decir, sin alguna oficial o institucional
Mientras que un excelente ejemplo de texto cerrado es un best seller, al estilo de Crepúsculo, Los juegos del hambre, Ghostgirl o alguna novela de Paulo Coelho. Donde el grado de significación es casi univoco. Porque incluso en aquellos textos, a pesar de la sorpresa de muchos bibliófilos, existen otras interpretaciones, como el paradigma del matrimonio expuesto en Crespúsculo.
Los best sellers nombrados son textos cerrados no por sus características particulares, sino por su facilidad de lectura, por su falta de correspondencia y comunicación con la tradición literaria, así como por la simpleza de su lenguaje. Asimismo, por su falta de ambigüedad,  no están siquiera cerca de convertirse en un reto intelectual.
En fin, el valor de la lectura es sobresaliente en Eco, aunque no lo sea la función del autor. Su perspectiva de la necesidad de correspondencia sería casi satisfactoria si el texto pudiera responder a nuestras preguntas. No obstante, debe suponerse la muerte del autor, así como valorarse que el acto de leer es apoyarse sobre una tumba. La transgresión del autor nos permite valorar en mayor medida la obra. Y esto, una violación para Eco, genera obras clásicas.
La relectura obtendrá grandes beneficios de las ‘presuposiciones’ de Eco y su ‘lector modelo’. Por ello nos hemos detenido en gran parte de su teoría.






[1] Ideología de acuerdo a la tradicional e insuficiente definición

Referencias
Eco, Umberto. (1993) Lector in Fabula. Barcelona: Lumen.


miércoles, 22 de enero de 2014

Introducción a las relaciones transtextuales

Gérard Genette expresó su inquietud por el objeto de la poética, o literariedad, en su obra Palimpestos, a través del análisis y reflexión de  las relaciones entre textos (transtextuales).
Estas relaciones transtextuales son: la intertextualidad, el paratexto, la metatextualidad y la architextualidad.
La intertextualidad es la presencia efectiva de un texto en otro. Esto implica que no existe un texto primigenio, sino que todo texto siempre va a estar formado por otros textos. La lógica de la lectura y escritura no es lineal sino asociativa, nada de lo que leemos es propiamente original, siempre tendemos a la relectura.
La intertextualidad es evidente en el cuento de El Guardagujas de Juan José Arreola, el cual posee una fuerte influencia de las obras de Franz Kafka (El Castillo, El Proceso, América). Lo laberíntico, la paradoja, lo ambiguo y lo fantasmagórico se muestra en el castillo como en la estación del tren de El Guardagujas. Los nombres de personajes y  lugares del cuento aluden a lo enigmático del protagonista de El Castillo. Ambas obras acuden al absurdo y a la ironía, etc.
-Este país es famoso por sus ferrocarriles, como usted sabe. Hasta ahora no ha sido posible organizarlos debidamente, pero se han hecho grandes cosas en lo que se refiere a la publicación de itinerarios y a la expedición de boletos. Las guías ferroviarias abarcan y enlazan todas las poblaciones de la nación; se expenden boletos hasta para las aldeas más remotas. Falta solamente que los convoyes cumplan las indicaciones contenidas en la guías y que pasen efectivamente por las estaciones. (Arreola; 2012)
En cuanto al paratexto, entendido como todo lo que rodea al texto, que incluye una gran gama de elementos, podemos citar el epígrafe de la obra de Roberto Bolaño, 2666, “Un oasis de horror en medio de un desierto de aburrimiento”, tomada de la obra de Charles Baudelaire. Este aparentemente insignificante elemento connota uno de los principales temas en la obra.
Una obra que se sirve de ambos tipos de relaciones entre textos (intertextualidad y paratextualidad) es el cuento de Borges, La casa de Asterión “Y la reina dio a  luz a un hijo que se llamó Asterión” (Apolodoro, Biblioteca, III, I). Donde se presenta el mito del minotauro desde una perspectiva distinta y bajo otros elementos estéticos. Incluso bajo una ideología distinta. Concibiendo a la ideología como la falsa representación de los  individuos en relación con sus condiciones de existencia.
Por otro lado, la metatextualidad, que es la relación crítica entre dos obras puede evidenciarse perfectamente en el Quijote y su relación con las novelas de caballería. En Madame Bovary y las novelas románticas.
Finalmente, la architextualidad puede comprenderse como una relación taxonómica entre dos obras, donde uno o determinados signos se repiten. Un claro ejemplo de ello es Santa de Federico Gamboa, quien asimila la novela naturalista Nana de  Émile Zola. El autor mexicano adapta las características naturalistas (lo grotesco, la brutalidad, la crudeza, el pesimismo, la degeneración, el determinismo y la fatalidad) a una sociedad distinta.
Es importante señalar, respecto a la intertextualidad, su interrelación al concepto de polifonía, entendida no sólo como la pluralidad de voces sino como el diálogo de textos. Julia Kristeva ha señalado que un texto citado siempre tiene una función. Jamás es inocente una alusión o referencia. Un texto es el compendio de ideologías distintas.

Arreola, Juan José. (2012) Confabulario. México: Booket.
Bolaño, Roberto. (2004) 2666. Barcelona: Anagrama.

Genette, Gerard. (1972) El discurso del relato. Paris: Editions du Seuil,